miércoles, 4 de diciembre de 2013

La honradez personal de Vincenc Navarro

Vincenc Navarro en su último artículo en Público (El resurgimiento del fascismo en España) afirma lo siguiente:
 
"El nacionalismo españolista era un nacionalismo extremo, de carácter racista (el día nacional se llamaba el día de la raza), sumamente excluyente, que estaba basado en una visión imperial del Reino de España y con una concepción radial del estado, centrado en Madrid, la capital del Reino. España era la única nación del país y la más antigua de Europa y tenía una misión civilizadora. Otras concepciones de España eran reprimidas y eliminadas, definiéndoselas como anti España."
 
 
Una vez más, el Sr. Navarro da muestras de su arrogante ignorancia y de su desbocada xenofobia antiespañola.
Se refiere al Día de la Raza como prueba de que el franquismo era racista. Pues bien, la fiesta no la estableció Franco, ya que se instituyó en 1918. Y en aquella época, la palabra raza no tenía el significado actual de biotipo biológico, sino que se refería, en general, a un pueblo o una cultura. Prueba de ello es que muchos países iberoamericanos, como Méjico, hicieron compatible su Día de la Raza con la afirmación de su esencia mestiza. Fue a partir de los años 30 y 40 cuando la palabra raza comenzó a asociarse mundialmente con el supremacismo biologicista (por razones obvias), y a partir de ahí se fue cambiando el concepto de raza por el de hispanidad (o semejantes) en los diferentes países iberoamericanos. En España pervivió, por cierto, a lo largo de la Segunda República, con gobiernos progresistas, liberales, y socialistas /comunistas /anarquistas.
Nada de esto le impide le impide al Sr. Navarro incluir el racismo en su distorsionada concepción del franquismo, e intentar introducirlo por esta vía en su fantasiosa concepción del “nacionalismo españolista”. Lo hace, eso sí, desde su—muy real—fanatismo catalanista, presidido por el viejo principio nacionalista de que “no dejes que la realidad histórica te estropee un buen agravio victimista” (como el de la superchería del 1714 que inspira La Diada).
Es el conocido recurso satanizador del otro, manifiestamente xenófobo, y que el Sr. Navarro utiliza constantemente, tanto cuando denuncia el sistema radial como un rasgo de totalitarismo (cuando, de hecho, prevalece en la mayoría de los países democráticos), como cuando intenta estigmatizar al político socialdemócrata José Bono como partícipe de una supuesta ideología totalitaria…
Todo esto desprestigia gravemente a un autor, ya que pone en cuestión tanto su capacidad intelectual como su honradez personal.
 
Piotr Kropotkin
 
 
 
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Tweets por @Nonius451