Fuente: comentario de "Piotr Kropotkin" al artículo de Vincenc Navarro en Público, en relación a un artículo de Vargas Llosa en ElPais
Los nacionalistas como el Sr. Navarro tienen complejo por estar promoviendo una ideología rupturista que saben profundamente destructiva. Para sacudirse ese complejo, tan obvio como justificado, intentan proyectarlo sobre los demás, atribuyéndoles una imagen especular de su propia ideología nacionalista. Es una maniobra dialéctica pueril, pero repetida por los nacionalistas con contumacia goebbelsiana.
Pero el patriotismo que predomina actualmente en la sociedad española es un patriotismo ilustrado claramente opuesto al nacionalismo catalanista, que tiene su arraigo en las ideologías oscurantistas que precedieron y sucedieron a la Ilustración, y que por ese motivo merece la etiqueta distintiva de ‘nacionalismo’. Voy a probarlo.
1. El Nacionalismo Oscurantista Catalán es abiertamente irracional, mientras que el Patriotismo Ilustrado Español es incuestionablemente racional. Cuando los nacionalistas catalanes celebran la Diada evocan un MITO HISTÓRICO, el supuesto levantamiento del pueblo catalán defendiendo su identidad cultural contra la España opresiva. De hecho, fue un enfrentamiento entre élites españolas (y españolistas) pugnando por diferentes sucesores a la Corona. En cambio, cuando los españoles celebran el 12-0, no celebran un mito histórico, sino un HECHO HISTÓRICO, porque cuando la ciencia historiográfica estudia el evento, comprueba que, efectivamente, la expedición española llegó a América en 1492. Los españoles contemporáneos no han abandonado el principio de realidad.
2. El Nacionalismo Oscurantista Catalán es abiertamente incivil, mientras que el Patriotismo Ilustrado Español es incuestionablemente civil. El Presidente de la Generalitat ha anunciado que logrará sus objetivos políticos, ya sea por medios legales o ilegales. Cuando un líder político anuncia la violación de la Ley puede pasar cualquier cosa, y él lo sabe, porque conoce la historia reciente de Yugoslavia. España, en cambio, promueve sus objetivos políticos por medios prudentes y legales. En el caso de Gibraltar, por ejemplo, declarado por la ONU territorio a descolonizar, siempre ha respetado el Derecho Internacional y nunca ha puesto en peligro la paz social. Los españoles contemporáneos no han abandonado el principio de sensatez.
3. El Nacionalismo Oscurantista Catalán se basa en la política primitiva del ‘chivo expiatorio’, donde el chivo es naturalmente España. España se presenta como causante de todos los males de Catalunya, de manera que la solución es deshacerse de ella, y todos los males de Cataluña desaparecerán. Pero lo cierto es que a Cataluña le ha ido muy bien con España. No sólo es más rica que las regiones vecinas de España (pese a ser contribuyente neta en España) sino que también es más rica que las regiones vecinas en Francia (pese a ser perceptoras netas—y culturalmente afines a Cataluña). Esto haría reflexionar a cualquiera, pero no a un nacionalista imbuido del atavismo del chivo expiatorio. Afortunadamente, el Patriotismo Ilustrado Español no participa de este ritual político cavernario contra ningún agente, interno o externo.
Es verdad que también hay españoles nacionalistas, pero son marginales. Ningún partido defiende una ideología nacionalista española. Por eso, el Sr. Navarro ha tenido que recurrir a nombres propios, como Aznar (para luego extender insidiosamente la calificación de ‘nacionalista’ al resto de España). Aznar desplegó, en efecto, un abyecto nacionalismo español en su Guerra de Irak, por ejemplo, prometiendo situar a España entre las naciones dominantes del S XXI. Curiosamente, ese nacionalismo se parecía a los demás en que (1) inventaba mitos (las armas de destrucción masiva), (2) quebrantaba la Ley (la Carta de Naciones Unidas), y (3) apelaba a un chivo expiatorio (el islamismo o, como Aznar lo llamaba, ‘islamofascismo’). ¿Y qué pasó? Pues que los españoles lo rechazaron en un 90%, salieron a la calle para denunciarlo, y mandaron a Aznar a casa...
Sería interesante que los catalanes hicieran lo mismo con sus líderes nacionalistas. De hecho, creo que eso va a ocurrir, porque el grueso de la ciudadanía catalana comparte los mismos valores ilustrados, si bien cabe prever que la reacción sea más lenta en este caso. La diferencia es que el delirio de Irak se encontró con una oposición política (el PSOE) que realizó su función, mientras que el delirio rupturista de Más se ha encontrado con una oposición (el PSC) que ha abdicado de ella. Pero el realineamiento político se está produciendo inexorablemente. No hay más que ver el ascenso de C’s, la caída libre del PSC, o la propia división en CIU.
Hay motivos, pues, para la confiar en que acabará prevaleciendo la racionalidad, el civismo, y la modernidad, tanto en Cataluña como en el resto de España.
Pero el patriotismo que predomina actualmente en la sociedad española es un patriotismo ilustrado claramente opuesto al nacionalismo catalanista, que tiene su arraigo en las ideologías oscurantistas que precedieron y sucedieron a la Ilustración, y que por ese motivo merece la etiqueta distintiva de ‘nacionalismo’. Voy a probarlo.
1. El Nacionalismo Oscurantista Catalán es abiertamente irracional, mientras que el Patriotismo Ilustrado Español es incuestionablemente racional. Cuando los nacionalistas catalanes celebran la Diada evocan un MITO HISTÓRICO, el supuesto levantamiento del pueblo catalán defendiendo su identidad cultural contra la España opresiva. De hecho, fue un enfrentamiento entre élites españolas (y españolistas) pugnando por diferentes sucesores a la Corona. En cambio, cuando los españoles celebran el 12-0, no celebran un mito histórico, sino un HECHO HISTÓRICO, porque cuando la ciencia historiográfica estudia el evento, comprueba que, efectivamente, la expedición española llegó a América en 1492. Los españoles contemporáneos no han abandonado el principio de realidad.
2. El Nacionalismo Oscurantista Catalán es abiertamente incivil, mientras que el Patriotismo Ilustrado Español es incuestionablemente civil. El Presidente de la Generalitat ha anunciado que logrará sus objetivos políticos, ya sea por medios legales o ilegales. Cuando un líder político anuncia la violación de la Ley puede pasar cualquier cosa, y él lo sabe, porque conoce la historia reciente de Yugoslavia. España, en cambio, promueve sus objetivos políticos por medios prudentes y legales. En el caso de Gibraltar, por ejemplo, declarado por la ONU territorio a descolonizar, siempre ha respetado el Derecho Internacional y nunca ha puesto en peligro la paz social. Los españoles contemporáneos no han abandonado el principio de sensatez.
3. El Nacionalismo Oscurantista Catalán se basa en la política primitiva del ‘chivo expiatorio’, donde el chivo es naturalmente España. España se presenta como causante de todos los males de Catalunya, de manera que la solución es deshacerse de ella, y todos los males de Cataluña desaparecerán. Pero lo cierto es que a Cataluña le ha ido muy bien con España. No sólo es más rica que las regiones vecinas de España (pese a ser contribuyente neta en España) sino que también es más rica que las regiones vecinas en Francia (pese a ser perceptoras netas—y culturalmente afines a Cataluña). Esto haría reflexionar a cualquiera, pero no a un nacionalista imbuido del atavismo del chivo expiatorio. Afortunadamente, el Patriotismo Ilustrado Español no participa de este ritual político cavernario contra ningún agente, interno o externo.
Es verdad que también hay españoles nacionalistas, pero son marginales. Ningún partido defiende una ideología nacionalista española. Por eso, el Sr. Navarro ha tenido que recurrir a nombres propios, como Aznar (para luego extender insidiosamente la calificación de ‘nacionalista’ al resto de España). Aznar desplegó, en efecto, un abyecto nacionalismo español en su Guerra de Irak, por ejemplo, prometiendo situar a España entre las naciones dominantes del S XXI. Curiosamente, ese nacionalismo se parecía a los demás en que (1) inventaba mitos (las armas de destrucción masiva), (2) quebrantaba la Ley (la Carta de Naciones Unidas), y (3) apelaba a un chivo expiatorio (el islamismo o, como Aznar lo llamaba, ‘islamofascismo’). ¿Y qué pasó? Pues que los españoles lo rechazaron en un 90%, salieron a la calle para denunciarlo, y mandaron a Aznar a casa...
Sería interesante que los catalanes hicieran lo mismo con sus líderes nacionalistas. De hecho, creo que eso va a ocurrir, porque el grueso de la ciudadanía catalana comparte los mismos valores ilustrados, si bien cabe prever que la reacción sea más lenta en este caso. La diferencia es que el delirio de Irak se encontró con una oposición política (el PSOE) que realizó su función, mientras que el delirio rupturista de Más se ha encontrado con una oposición (el PSC) que ha abdicado de ella. Pero el realineamiento político se está produciendo inexorablemente. No hay más que ver el ascenso de C’s, la caída libre del PSC, o la propia división en CIU.
Hay motivos, pues, para la confiar en que acabará prevaleciendo la racionalidad, el civismo, y la modernidad, tanto en Cataluña como en el resto de España.
Escrito en tono irónico, viendo que el nacionalismo español es veinte veces peor que el catalán, podría digerirse, de otro modo demuestra una soberana ignorancia, producto de la propia ceguera.
ResponderEliminarMikel Itulain se despacha ventilando sus prejuicios, sin aportar un solo argumento racional. (Si alguien atisba algún argumento en su comentario, que lo señale, por favor.)
ResponderEliminarParece confirmarse que la irracionalidad es consustancial al nacionalismo…
Es importante informar a los nacionalistas de la existencia de una tradición moderna, que emergió con el Humanismo renacentista y estalló en la era de la Ilustración , y que requiere fundar las aseveraciones en argumentos lógicos y hechos observables. Lo contrario es esconderse en la caverna.
Kropotkin
Definicion de nacionalismo segun la RAE: "Ideología que atribuye entidad propia y diferenciada a un territorio y a sus ciudadanos, y en la que se fundan aspiraciones políticas muy diversas." Con lo que decir que el nacionalismo español es minoritario es una broma.
ResponderEliminarY España no existia en 1492, fue la corona de Castilla, y esa era la bandera que llevaba la expedición. El matrimonio de Isabel y Fernando no unifica los territorios, solamente la unión dinástica. Durante muchos años el rey de "españa" no era tal, sino el rey de Castilla, Aragon, etc. etc. Aunque el matrimonio significo el comienzo de lo que a la larga seria España, no es hasta la Constitución de Cadiz, que supone una ley comun a todo el territorio, donde podemos empezar a hablar de España, y no "las españas" como se conocia.
Y en Catalunya ya sabemos que la guerra de secesión no es una guerra España-Catalunya, es una guerra donde, como consecuencia de la victoria borbónica frente a la que defendian los catalanes, éste acaba con las libertades políticas de Catalunya como pueblo con el decreto de nueva planta.
El DRAE no es más que un diccionario de uso, que ofrece sólo una primera aproximación al contenido habitual de una determinada palabra. No es una enciclopedia política, ni mucho menos un código con el que dirimir un debate sobre la significación profunda de un concepto político. En mi comentario sobre el nacionalismo intenté precisamente desentrañar la realidad que subyace a los movimientos que se identifican como nacionalistas, y mencioné tres: el rechazo del principio de realidad, el rechazo del principio de civilidad, y la adopción de la maniobra ritual del chivo expiatorio. Mostré la presencia de los tres elementos en el nacionalismo catalán, y su ausencia en el patriotismo español contemporáneo. No veo ninguna refutación sustancial de este análisis.
EliminarDices que España no existía en 1492. Es algo que repiten constantemente los libros de adoctrinamiento que se imponen en los colegios catalanes (y parece que con éxito), pero es sustancialmente falso. Sólo es cierto en el sentido anecdótico de que ése no era el nombre oficial de España. Pero todo el mundo hablaba de ‘España’, aquí y en el extranjero, en referencia a la unidad política soberana (es decir, el Estado) que se constituyó mediante la unión dinástica de Isabel y Fernado. Hoy mismo he estado leyendo un texto político de Vázquez de Menchaca sobre precedencias diplomáticas que se refiere sistemáticamente a Felipe II como ‘Rey de España’. No veo que el hecho de que España no se llamara así oficialmente en 1492 impida que actualmente pueda adoptarse el descubrimiento de América como motivo de la Fiesta Nacional. Los españoles contemporáneos no han abandonado el principio de realidad.
En eso se diferencian de los nacionalistas catalanes cuando celebran la Diada. Dices que los catalanes saben que el enfrentamiento de 1714 no tuvo nada que ver con la identidad nacional catalana. Entonces, ¿Por qué lo celebran? Dices que porque en 1716 se promulgaron los Decretos de Nueva Planta. No. Eso es un añadido posterior para tapar el absurdo de celebrar un conflicto entre élites españolas como una lucha nacional catalana. La Diada celebra la lucha ‘heroica’ de Casanovas de 1714. ¿Quién celebra una fecha porque años después ocurre otra cosa? Es aún más absurdo.
Y es absurdo porque es mentira. La narrativa de los Decretos de Nueva Planta no es más que una nueva producción de la industria victimista del nacionalismo catalán, dirigida a presentar a España como culpable de los males de Cataluña, y propiciar así su sacrificio como chivo expiatorio. ¿De verdad no te das cuenta de la maniobra?
La Fiesta Nacional del 12 de Octubre no sólo conmemora un hecho real (y no fantasioso), sino que está escogido simplemente para celebrar España (y no para generar agravios contra nadie). Todos estos rasgos de irracionalidad y hostilidad son característicos del nacionalismo, y afortunadamente no están presentes en la España contemporánea, o sólo de modo marginal, por lo que sólo cabría hablar de nacionalismo español en referencia a esa minoría marginal.
Kropotkin
"La definitiva solución del problema de las nacionalidades que integran el Estado español parte indefectiblemente del pleno reconocimiento del derecho de autodeterminación de las mismas que comporta la facultad de que cada nacionalidad pueda determinar libremente las relaciones que va a mantener con el resto de los pueblos que integran el Estado español." (PSOE, Suresnes, 1974)
ResponderEliminar"En los últimos 40 años, el régimen surgido de la guerra civil ha intentado negar la evidencia de que históricamente España es una realidad configurada por una pluralidad de nacionalidades y regiones que hoy integran el estado español. El reconocimiento del carácter plural y diferenciado del Estado español ha constituido un principio permanente para el PSOE a lo largo de toda su historia. Frente a los planteamientos centralistas defendidos por la oligarquía, [...] " (PSOE, idem)
En esta entrada de Nonius451
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se proponía un modelo de derecho de autodeterminación que es claramente superior, en términos democráticos, al que aceptó el clan de la tortilla, y que ahora propugna por el espabilado de Mas.